jueves, 7 de julio de 2016

Monografia de la provincia de Bolívar- La Libertad,Perú.


MONOGRAFIA  DE LA PROVINCIA DE BOLÍVAR.
Por el Capitán Gustavo Arboleda  A.
El conjunto geográfico formado por el Collaos, que corona el nevado de Cajamarquilla,no ha merecido en el transcurso de medio siglo, la más incipiente atención espiritual o material, no obstante su belleza, majestad  y riqueza. No hay en  él nada de misterio, es amplia realidad física.
Le sobra el agua que mantiene en reservorios naturales, le sobra el pastal inmenso de sus punas, le sobra tierras para los más variados sembríos y le sobra cumbres enhiestas, miradores ciclópeos para extasiarse en la esplendidez del paisaje, cruzado de atrayentes matices, en sus tre y dos direcciones, que enlaza aquel  horizonte sin par. Si a esta maravillosa creación nos fuera darle preguntarle: ¿Qué le falta? Respondería: el esfuerzo y la acción de mis amos. Un dichoso día, el culto de la naturaleza, llevó a don Antonio Raimondi a estas cimas que se diría aclamaron su paso fugaz. En respuesta, el sabio se detuvo para dejarles el recuerdo de su nombre. En el peñón Cashurco, cuya silueta se destaca entre otros que le rodean, buriló, con propias mano, esos caracteres simbólicos: A.RAIMONDI, exponiéndolos hacia el Oriente, como para que el Sol de todas las mañanas, antes de besar la floración de la selva, saludara con sus nacientes matices al mudo testigo de su ejemplar constancia y sabiduría.
HISTORIA.
POBLADORES PRIMITIVOS.
La edad histórica de las regiones del Perú, no tiene todavía el dato seguro de un punto de partida. La Arqueología, Paleontología y Critica Histórica, que día a día van haciendo luz y aproximando a la realidad las leyendas, y mitos con que se ha historiado el más lejano origen de los pueblos, no han llegado a conclusiones en lo que respecta a la región. Pero, como el tema se relaciona únicamente con  el territorio de la provincia de Bolívar, antes Cajamarquilla, es conveniente iniciar esta descripción histórica desde el periodo preincaico, cuyas innúmeras ruinas, esparcidas en la región, la definen como tal, entre las civilizaciones antiguas del Ande.
Los nombres geográficos, algunas tradiciones, y aún documentos de la conquista, comprueban que el territorio estuvo ocupado por agrupaciones de tribus llamadas Huancas y Collas en la Cordillera y vertientes de la margen derecha del Marañón; Gihuitos, Cascabosoas, Opiritas, y otras en la ceja de la selva y a la izquierda del Huallaga.
LOS GUAYAS. (Nombre dado a la región por la abundancia de guayabas). Precisa dar cuenta en este párrafo especial del importante hallazgo de casi una segura prueba de la existencia de caracteres de escritura en alguna de nuestras civilizaciones antiguas o en la más avanzada.
En un huaco encontrado en la  región del  Alto Guayabamba, cuya fotografía ilustra la presente descripción, puede verse una serie de caracteres, que por su forma, disposición y rayado, a ambos lados, de una serpiente de dos cabezas, demuestra claramente que explica algo. La sola observación del conjunto induce a describir ese algo que evoca toda forma escrita, digna de una prolija investigación filológica.
Otras muestras y pruebas de aquella civilización, no conocidas ni catalogadas aún, se darán a conocer en un estudio especial del suscrito. Sabemos que las investigaciones filológicas practicadas en jeroglíficos y monumentos, han permitido descubrir en los idiomas griego antiguo, indostano y egipcio, gran número de voces del keshua, que a la vez quedó indicado como idioma de los antis primitivos radicados en la parte alta de la gran cuenca amazónica. En consecuencia, si  esta agrupación perduró en la misma región como integrante del Tahuantinsuyo, podemos aceptar que el origen del autóctono keshua alcanza la más remota antigüedad.
Los Guayas han dejado los vestigios propios de una civilización muy  antigua
 Y avanzada y como tal, procedente quizá, de los primitivos Antis, que tomaron la región de la Selva ,para defenderse mejor de las tribus numerosas que ocuparon la parte llana del Bajo Amazonas, consiguiendo dominar y afianzarse en la cuenca alta del río Guayabamba. Los Guayas demuestran esfuerzo constructivo y avanzado en su gran urbanziación, cuya superficie se aproxima a la de Chan Chan, existiendo además en ella vestigios de importancia histórica no estudiados todavía.
Esta civilización tuvo como poderosa rival en su frontera Norte a la de los Shachas, establecidos en la hoya del Utcubamba,que divide en dos ramales a la Cordillera Central, que desciende y alcanza el Marañón, en la curva donde  cambia su dirección al E. para entrar en la selva.
Los Shachas, cuyo núcleo de defensa fue el gran campo atrincherado de Kuélap, sometieron o se confederaron con los de Guayabamba, afrontando así a la invasión incaica.
INCANATO.
La expedición militar de Túpac Inca Yupanqui, cuyo objeto fue el reino de los Shachas,eligió como teatro de operaciones el Collaos,cumpliendo el itinerario siguiente: Vadeó el Marañón en el puerto de Calemar,ascendiendo la cordillera por Condormarca; tomó dirección al N. siguiendo el gran camino llamado del Inca, por la región de Ubilana,donde se bifurca: el ramal oriental desciende al Pajatén, Guayabamba y el Mayo, de la margen izquierda del Huallaga; otro sigue la Cordillera del Shirimay Caja, Cujibamba, faldas del Nevado de Cajamarquilla,las lagunas donde nace el río Guayabamba y el cuello del cerro Ulila, a 4160 metros sobre el nivel del mar, última cumbre del Collaos y espléndido mirador de toda la región, de aquí bajaron los expedicionarios a la cuenca superior del río Utcubamba, de donde se domina y amenaza por el campo del flanco atrincherado de Kuélap, que se yergue en la margen izquierda del mismo río.
No corresponde a esta descripción seguir la interesante campaña que terminó con el sometimiento de estos reynos, de Shachas y Collaos al Tahuantinsuyo, donde formaron parte de la gran comarca del gran Antisuyo. El imperio incaico no alcanzó a establecer sus sistemas administrativos en esta región, sin duda por las contingencias de la campaña ofensiva, que seguía con empeño hacia el N. y también por el escaso peligro que representaban los pueblos sometidos, siendo aquel ya dueño de las defensas de Kuélap.
Por otra parte,el tiempo transcurrido entre esta campaña y la muerte de Huayna Cápac, con sus consecuencias, es relativamente corto para que se pudiera instaurar los amplios sistemas del Incanato. Lo expuesto justifica la existencia de  ruinas con las características del periodo preincaico únicamente, notándose algunos dibujos  de estilo rupestre, por lo general del Sol, la Luna y algunos animales, pero bastante rudimentario. El más curioso de éstos es el ORNITORRINCO, mamífero cuyo hocico prolongado y córneo se parece al pico de pato. En Pana y en los flancos del Nevado Cajamarquilla,se descubre en las peñas, pintado en rojo indeleble, en la misma forma aplastada en que aparece el animal, entre los estratos, es decir, que hace el efecto de la impresión con sangre, el momento del aplastamiento.
En el tingo de la Palla, confluencia del río Crisnejas con el Marañón, existe una gran piedra, que por su forma y longitud, revela que fue preparada para la construcción de un puente sobre el gran río, pero quedó abandonada. Por lo demás, el hecho de que se haya extinguido el idioma Keshua y aún los dialectos, corrobora la aseveración de que no fue difundido convenientemente. En conclusión, la civilización incaica no dejó vestigio duradero en la región.
Durante la conquista española, los Gihuitos, Opiritas, Cascabosoas, Motilones, Tabalosos, etc. Del Huallaga, favorecidos por su situación geográfica, que les permitía fácil y segura retirada, de la selva, volvieron a la rebeldía, y reforzados oportunamente por los fugitivos de las huestes de Manco Inca, después de la destrucción del imperio de Vilcabamba, continuaron oponiendo tenaz resistencia durante todo el periodo de lucha entre los conquistadores.
El virrey Marqués de Cañete, resolvió emprender la campaña definitiva contra los “infieles”. Al efecto comisionó al Capitán Gaspar Enríquez de Montalvo, quien con sus tropas de infantería y algunos padres franciscanos, pasó al Marañón con rumbo al Collaos, cuya indiada ya integraba los diversos Repartimientos y Encomiendas en que se había dividido el territorio. La infantería española, seguida de los indios “voluntarios”, al mando del Cacique Chiguala, de la Encomienda de Bambamarca, vencedora en las alturas, continuó por el Guayabamba, batiendo a los infieles de la región, al mismo tiempo que Ursúa bajaba de Chachapoyas por el Mayo, en busca de la laguna de oro y el Dorado. En Sandóval se puso término a la campaña y “se hizo  gran castigo y escarmiento”. El Cacique Chiguala, es sin duda, el primer autóctono que obtuvo, como premio de sus servicios, el grado de Capitán de Indios, refrendado por la Corona  y además tenido como caballero del Consejo de su Majestad.
VIRREINATO.
La influencia de la organización virreinal, en la región de Cajamarquilla, fue ante todo de carácter político y religioso, destacándose en ella la explotación de las minas de oro y plata, que alcanzó la categoría de industria preferente. En lo político se creó el “Corregimiento de de las provincias de Cajamarquilla y Collay”, subordinado a la Intendencia de Trujillo. Chachapoyas fue agregado y después segregado por la creación del nuevo  Corregimiento de Chachapoyas y Moyobamba. En lo judicial, el  Corregidor y Juez Comisionado, actuaban en los centros poblados de importancia, como lo fueron por entonces los mineros.
El asiento de Pataz, el de Parcoy y el pueblo de Cajamarquilla, fueron designados, según las exigencias del momento, como centro administrativo de Corregimiento. Hay un interregno durante el cual se discute linderación entre  éste y el Corregimiento del Norte, motivado por procedimientos caprichosos de los corregidores sobre derecho de jurisdicción. Esto dio lugar a que los pueblos de  Chómal, Chíbul, Jimbe, Guayabeaba y Chuquibamba, pasaran alternativamente de un mandato a otro y  a que los habitantes aburridos de su peregrinaje, abandonaran dichos pueblos, convirtiéndose algunos de ellos en terribles focos de parásitos como el de la uta, que aún se mantiene, haciendo víctimas en el de Chíbul, de Uchucmarca.
Desde el punto de vista religioso, el clero desempeñó un papel de gran importancia  en la obra colonizadora de la Selva, por medio de las abnegadas misiones franciscanas, que marchando al lado de los destacamentos militares, enseñaban a los infieles la doctrina cristiana. Este Corregimiento, por su situación geográfica especial, constituyó la  portada segura para pasar  a la Selva, durante las primeras campañas catequizadoras,prolongadas algunas hasta Maynas. Estas empresas trajeron como consecuencia las Capellanías, que a la vez que afianzaban el espíritu religioso y aprovisionamiento de tan ejemplares cruzadas, durante las cuales se edificaron iglesias y capillas en las más apartadas regiones. En cambio, la industria minera se inició en un ambiente de violencia y dificultades sin cuento, por las exigencias extremadas en el trabajo rudo con la roca, los aguajes y los derrumbos. Lamentable proceso que tuvo su origen en la preferencia que dio  a los sistemas empíricos de explotación sobre otros más humanos, ya conocidos.
En esta etapa histórica, el Collaos tuvo otro ilustré visitante, cumbre espiritual, cuya huella podemos seguir. Hacia el S.E., rumbo al “tampu de Callangate”, se pierde la cinta sinuosa del Camino del Inca. Siguiendo por él y a la vuelta de la cunga se da con la  pila magnifica, una columna de agua cristalina, de 20 metros de altura, que se desliza sobre un peñón granítico, forma el natural y evocador monumento que  impresiona por sus motivos enérgicos  de belleza. Allí oró, bebió de la fuente  y la bendijo, el Santo Arzobispo  Toribio Alfonso de Mogrovejo, en sus ejemplares peregrinaciones apostólicas a la legendaria Maynas, por lo que lleva su nombre.
REPÚBLICA.
El sistema republicano ejerce una reacción favorable en lo que respecta al problema de la población; no así en lo relacionado con las expediciones colonizadoras, que se reducen notablemente. En cuanto a la industria minera, queda suprimida totalmente. En 1928 se declara propietarios a indígenas y mestizos de as tierras cuya posesión disfrutaban. En consecuencia se crearon propiedades y se deslindaron las comunidades, estableciéndose con ello nuevos factores de progreso económico, individual y colectivo.
Este periodo tiene mayor interés en lo referente a la evolución  de la organización política. Todo el territorio del Collaos dejó de ser un Corregimiento para constituir una provincia del departamento de La Libertad. Asimismo se elevó a la categoría de Villa al caserío de Cajamarquilla (29 de julio de 1828). Al demarcarse el  obispado de Maynas fue incorporado al obispado de Amazonas, en 1832; pero el  10 de febrero de 1840, se dio la ley de reincorporación de la Provincia, con el nombre de Pataz, al departamento de La Libertad, con la ciudad de Parcoy como capital. La villa de Tayabamba pasó a ser capital de provincia en diciembre de 1895. Finalmente, la ley promulgada el 20 de noviembre de 1916, creó la provincia de Cajamarquilla, constituida como sigue:
Se segregó de la provincia de Pataz los distritos de Uchucmarca, Cajamarquilla y Bambamarca; los distritos de Longotea, Ucuncha y Condormarca fueron elevados a la categoría de distritos. Quedó como capital de la provincia la villa de Cajamarquilla. Posteriormente se dio a la provincia el nombre de Bolívar.
Reconocimiento oficial de la comunidad de Uchucmarca.

No hay comentarios: